Hace ya más de una semana que conozco mi próximo destino. Por fin, este año me han dado una vacante "informatizada", así que estoy muy contenta de saber que trabajo desde el día uno de septiembre y que, poco a poco, hay un progreso en mi situación interina. A ver si con un poco de suerte, la próxima convocatoria es la mía y consigo la plaza...
Pero ahora, lo que toca es celebrar la vacante y celebrar que, aunque ha sido difícil, he conseguido ya piso. El destino es la Línea de la Concepción... Por ahí me dicen que si es que me quiero volver gadittana o algo así, jeje... Yo hubiera preferido, como es natural, quedarme en Málaga, pero así son las cosas; más vale buscar el lado positivo porque si no... Y positivo es que estoy más cerca que el año pasado, así que no echaré tanto de menos mi casa pues vendré más a menudo. Y positivo es que, una vez más, tengo la oportunidad de conocer un sitio nuevo, que seguro que me brindará nuevas oportunidades de aprender. Reconozco que estos días he estado muy nerviosa en el sentido más negativo, porque hasta que una no sabe dónde va a dormir se pasa un poco mal, y viendo los precios de alquiler que se manejan en la Línea, os aseguro que pensar en mi bolsillo también me tiene bien preocupada. Pero una vez que ayer ya hice mi primer viajito al pueblo para conseguir la casa y ya está hecha esa gestión, todo se ve desde una perspectiva más serena.
En cuanto al pisito, decir que es el mejor sitio que he alquilado sería mentir. Es viejito, casi todos los muebles también, con cajones que se atrancan y puertas que no encajan, sin embargo, lo importante lo tiene: un sofá que no me va a dejar la espalda hecha un ocho, una cama cómoda, electrodomésticos nuevos en la cocina y baño también reformado, que puestos a que haya algo reformado en casa, mejor que sea eso. Es muy luminoso y tengo una terraza que da a la bahia, así que espero ver desde allí alguna que otra puesta de sol. También tengo dos habiaciones extra, cada una con dos camas, así que espero que alguno se anime a ver esa puesta de sol conmigo. Haremos una pizza en un horno de butano, de los de antes, y brindaremos con un lambrusquito. ¿Os apetece el plan?
Me han dicho que la zona no es muy buena y realmente el aspecto de las viviendas de por allí no es el de una urbanización de lujo como mi casita de Chiclana, pero vaya, por lo pronto, ya he conocido a mis caseros, que han vivido allí toda la vida y siguen volviedo cada verano al que consideran su hogar... tan mal no se debe estar, ¿no? Y desde luego, la ubicación es estupenda para mí: cerca del instituto, cerca del centro, cerca de la frontera con Gibraltar, playa en frente, Mercadona detrás, farmacia, ambulatorio... Todo a un salto de mata. Perfect!! (¿Qué? ¿No soy suficientemente positiva?)
Hablar del instituto no puedo habalr aún, así que me reservo el tema para una próxima entrada, una vez que haya empezado el curso. Referencias tengo, claro, y aunque es inevitable no hacerse a la idea de que no voy a tener otros "ÚNICOS", como en Salobreña, prefiero hacer el esfuerzo de no condicionarme por las referencias que otros me den. Al final, después, tienes que conocer a tus alumnos uno por uno y tratar de sacar de ellos lo mejor que puedan ofrecer, del mismo modo que cada curso una debe tratar de sacar de una misma lo mejor que puedes dar. Solo espero hacerlo un poco mejor que el año pasado y así cada vez. A ver qué tal. Ya habrá tiempo de hacer valoraciones generales a final de junio.
En fin, ya huele a aventura. Pero, en esta ocasión, me voy a permitir disfrutar del final de mis vacaciones con esta nueva sensación de paz que hasta ahora no había podido saborear, teniendo siempre la incertidumbre calando mis huesos hasta bien entrado Septiembre, esperando por un puesto.
Lo cierto es que estoy pasando unos ratos muy agradables y, por cierto, tengo que agradecer esto a mi visita de estos días. Aunque en realidad llevamos todo el verano compartiendo momentos estupendos, por unos días, además, se queda en casa, haciendo posible que disfrute un poco más de esta nueva amistad. Ojalá solo sea el principio y que el hecho de que cada uno se vaya para la costa opuesta al final del verano, no suponga un fin. Pero si así fuera, solo quiero que sepas que lo he pasado muy bien y que conocerte me ha hecho un poquito más feliz. Me gusta la pimienta en casi todos mis platos y tú has sido la pimienta de mi verano, jeje...
Bien, voy a continuar con mis cosillas. Hace un calor de averno, así que una duchita fría más se impone antes de dormir.