Bajo la tenue luz de la luna creciente de agosto, sus lágrimas se confiaban al mar fundiéndose con el rebalaje. Observando como desaparecía con discreción la huella de la ola rota hasta que una nueva inundaba una vez más su espacio en una sucesión infinita, comprendió que siempre estaría sola, que cualquier sensación de compañía es solo circunstancial. Tal vez esa certeza fuera a la que debía abrazar, para no hacerlo a la decepción.
Si la amistad te ha traido por aquí, eres bienvenido para compartir mis momentos de tranquilidad, aquellos que podré dedicar a este diario, sin guión, ni intención.
Y si es el azar lo que ha hecho que aterrices con un click en este blog, bienvenido también: si llegaste y encontraste algo que te sirva, mejor.
Y si es el azar lo que ha hecho que aterrices con un click en este blog, bienvenido también: si llegaste y encontraste algo que te sirva, mejor.
lunes, 26 de agosto de 2024
lunes, 19 de agosto de 2024
MICRORRELATO: ANTE
Ante aquel torrente indómito de emociones, de poco le iban a servir su razón y la prudencia a las que tantas veces se había aferrado. Así que, se agarró el corazón y se lanzó en el siguiente latido. Prefirió saltar que esperar a que la razón de otro le empujara más tarde. No fue fácil dejarse arrastrar por la corriente, pero una vez lo hizo, comprobó que no se ahogaba.
viernes, 9 de agosto de 2024
MICRORRELATO: A
A juicio de cualquiera, aquella no era una situación fácil ni cómoda, pero en ese momento, a pesar de instalarse un sudor nervioso entre la piel desnuda que no cubría sus prendas cortas de verano y aquel ajado asiento, experimentaba el alivio y la satisfacción de empezar a soltar el pesado lastre.
domingo, 4 de agosto de 2024
MICRORRELATO: ROPA DE ESTACIÓN
Cerró la caja y la guardó en el armario, esperando a usarla en la próxima temporada.
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