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miércoles, 5 de septiembre de 2012

ASÍ ESTÁN LAS COSAS

La verdad es que no tenía intención de escribir ninguna entrada hablando sobre la situación laboral en la que me encuentro, más que nada por no deprimirme aún más, pero una buena amiga me ha sugerido que hable de ello y ponga aquí mi currículo para que sea una forma más de llegar a alguien que pueda echarme un cable. Bien pensado, ya que comparto con vosotros momentos y sentimientos muy personales, ¿por qué no también hacerlo ahora que lo que me quita el sueño es cómo voy a pagar mi hipoteca el mes que viene?

Como todo el mundo sabe los recortes en Educación han afectado a miles de interinos, entre ellos me encuentro yo. Aún guardo la esperanza de que cuando empiece oficialmente el curso el día 17 de Septiembre, la necesidad de docentes se imponga y nos empiecen a llamar de las Delegaciones, sin embargo, ahora mismo solo puedo ver en mi mente el número 213, que es la posición en la que me encuentro en la lista... y no me resulta un número muy halagüeño, y no porque termine en 13, sino porque se trata de dos centenas. Por si esto no fuera suficiente motivo para tenerme inquieta, resulta que, a pesar de haber cotizado estos años atrás lo suficiente como para tener derecho a recibir la prestación por desempleo, al menos por unos seis meses, resulta que solo dispongo de 4 días de paro. ¿Que cómo es esto? Pues veréis amigos, resulta que en 2007 solicité la prestación que me fue concedida y que he ido usando en los periodos en los que me he quedado desempleada y, de esta prestación, aún me quedan 4 días a los que, me dicen en el INEM, que no puedo renunciar. Es decir, por fuerza he de agotar esa prestación y después... Pues nada, a no ser que volviera a ser contratada y al cesar ese nuevo contrato, sí estaría en situación de cobrar aquello que me corresponde y que debería serme concedido sin más tonterías. ¡Una locura, vamos! Bueno, me dan la opción, creo, de solicitar la ayuda de los 400 famosos euros, pero entonces, estaría igualmente condenada a agotar toda esa ayuda, desperdiciando, según yo lo veo, estos años de religiosa cotización. ¡Por Dios! ¡Con 400 euros no cubro ni el coste de la hipoteca! Para colmo me siento mal, muy mal, porque me quejo y me angustio con mi situación sabiendo que hay muchísima gente que está muchísimo peor que yo. Pero lo que me angustia es precisamente pensar que si no consigo solucionar esto ahora, seré yo también una de esas personas.

Pues sí, así están las cosas, y como pensar en ello no me va a arreglar nada y sí que puede empeorarlo (mis nervios no son de acero precisamente), lo que no puedo es quedarme de brazos cruzados esperando a un milagro que ocurra a partir del 17 de Septiembre. Desde luego que rezo, visualizo y me digo mil veces al meterme en la cama cada noche que todo va a salir bien, pero además de esto hay que hacer algo más práctico, que los milagros llegan si tú los ayudas un poco, así que ya he movido mi currículo por los colegios privados que he podido y ya pienso en el siguiente paso... Y si no puede ser trabajar en mi campo, pues trabajaré donde haga falta, que no será la primera vez.

Como os decía al principio, publicar aquí el currículo ha sido sugerencia de una amiga y creo que no es mala idea. Despué de todo, el boca a boca siempre ha sido la mejor manera de conseguir que la gente se entere de las cosas, así que, si alguien al leer esto y ver el currículo adjunto puede ofrecerme un contrato, no dude en hacerlo, ya sea contactando a través de este mismo blog o, quizás mejor, a través de correo electrónico: bioygeoelop@gmail.com.

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