jueves, 19 de diciembre de 2013

ÉSTE, ÉSE, AQUÉL... ¿?

Los que me conocéis más de cerca (y todos los alumnos que han pasado por mis clases) sabéis que, a pesar de ser "de Ciencias", las palabras siempre han sido mi debilidad y nunca he descuidado el uso del lenguaje, sobre todo, a la hora de escribir. Y es que ser "de Ciencias" no es escusa para mancillar nuestra gramática y, en general, nuestro bello idioma. Ahora que además escribo por encargo para otros y no solo para mí, cuido aún más la ortografía y la puntuación. Yo he aprendido a escribir, leyendo, así que debo pensar que, tal vez, algún niño pueda aprender algo leyéndome a mí.

Por esta razón, hoy me encuentro redactando este post. Aunque no se ha dado el caso de que nadie venga reclamándome nada al respecto de faltas ortográficas en mis cuentos, estoy segura de que algún error habrá en ellos. Y digo error porque estoy segura de que, de haberlos, fueron lapsus provocados por mi mal uso del teclado de un ordenador (que la mecanografía no es uno de mis fuertes). Suelo revisar lo escrito, pero no siempre tengo tiempo para hacerlo concienzudamente, así que pido perdón por cualquier errata que podáis encontrar. No obstante, no es ése el caso de los pronombres demostrativos. YO LOS TILDO A CONCIENCIA.

Desde el 2010, la RAE contempla que los demostrativos no lleven tilde en ningún caso. Anteriormente, cuando los demostrativos hacían la función de adjetivos en la oración no se marcaban, mientras que sí lo hacían si su función era la de pronombres. Sin embargo, sé que no estoy comentiendo falta ortográfica al continuar tildando mis "éste, ése y aquél". Y es que, que yo sepa, hasta ahora, esta modificación sobre la acentuación de estos pronombres no tiene categoría de regla, sino de consejo gramatical. Y como los consejos están para seguirlos o no seguirlos, entiendo que estoy en mi derecho a rehusar tal orientación.

Hay quien justifica mi propia decisión diiciendo que por la misma regla de tres, no se debería tildar la palabra "dé" cuando hace las veces de verbo, y que entonces, "o todos moros o todos cristianos"; sin embargo, ésta no es mi escusa. También se aconsejó en el 2010 dejar de tildar la palabra "solo" en cualquier caso, y este consejo sí que lo sigo. Resulta que con esa palabra siempre tuve dudas y el hecho de que ahora no sea falta no ponerle tilde, me simplifica la vida :)  Pero solo porque a la hora de leer nunca me supuso una ayuda o todo lo contrario ver la palabra con o sin mi querida virgulilla. Mas no me pasa lo mismo con los pronombres demostrativos. Me explico:

Cuando leemos, a pesar de que tanto si son adjetivos, como si son pronombres los demostrativos son palabras llanas, no hacemos la misma fuerza al pronunciarlas. Cuando nos encontramos con un demostrativo acompañando a un sustantivo, por inercia tendemos a poner la fuerza de voz en el sustantivo que viene inmediatamente después, lo cual es lógico, que para eso el sustantivo es el núcleo del grupo nominal; pero si el demostrativo es un pronombre, nos detenemos a leer con más fuerza en él. Eso implica una sutil parada en nuestra lectura: la necesaria para enfatizar la palabra. Por esta razón, para mí, la tilde es como un semáforo, un aviso de que debo dar el golpe de voz justo ahí y no en la palabra contigua.

Así que ya véis, ésta es la razón por la que seguiré abogando por las tildes en los pronombres demostrativos. No solo porque sean palabras de categoría gramatical diferente a los adjetivos demostrativos, sino por una cuestión puramente pragmática (que para esto sí que  soy "de Ciencias"). Al menos, mientras que mis relatos no sean comercializados a gran escala y pueda explicar a mis lectores el porqué de mi elección, me mantendré en mis trece :P .Eso sí, hay que ser coherente, si empiezas escribiendo un texto eludiendo el consejo de la RAE, sigue hasta el final con este criterio. No vale hacerlo unas veces y otras no. Creo sinceramente que esta modificación a la antigua regla es un error y no soy la única que lo piensa. De hecho, la RAE tuvo que admitir no hace mucho el fracaso de este consejo gramatical.

 


Una cosilla más: me apunto explicar otro día algo muy práctico para desenredar el lío del uso de "la", "lo" o "le". Es que he visto los comentarios al respecto del link que os he puesto y creo que merece la pena hablar de ello en otra ocasión. Ya os contaré.

domingo, 8 de diciembre de 2013

EXCUSA PARA BRINDAR CON VINO

No sé ya los años que hace que no celebro el día de mi santo, al menos, no cómo hacía antes. Recuerdo grandes fiestas con muchos amigos reunidos en casa. Y es que como coincide con la Inmaculada Concepción, casi nadie conoce que este día también es mi onomástica. Por eso, yo me encargaba de que mis allegados no faltaran a la cita organizando un ágape por todo lo alto. 

Y es que la cosa tiene historia...aunque, la verdad, ahora ya no sé si mis recuerdos son el remanente de una realidad o solo es una fantasía que durante toda mi vida di por vivida. Lo digo porque a veces nuestro cerebro nos engaña; las cosas ocurren de una manera y nosotros las archivamos versionada. En cualquier caso, así es cómo yo recuerdo que pasaron las cosas y, a estas alturas de mi vida no voy a dudar de este archivo, por más que, tal vez, quizás, a lo mejor, no ocurriera tal y como lo fijé  en el hipocampo (o en la corteza cerebral como parece ser que en realidad ocurre según últimas investigaciones) Veréis:

Tal día como hoy se casaba uno de mis tíos. Alguien en la puerta de la Iglesia me preguntó mi nombre y luego quiso saber cuando era mi santo, a lo que yo respondí que no tenía. Entonces la señora me dijo que me lo pusiera el día que a mí me diera la gana y decidí que ése era tan buen día como otro. A partir de entonces el ocho de Diciembre celebré mi santo. Obviamente, como yo inventé la fecha, solo mis padres y hermanos me felicitaban llegado el momento. No obstante, en una ocasión, creo que andaba yo por séptimo u octavo de EGB, una compañera que ni siquiera era de mi círculo más íntimo, me felicitó tras el día de fiesta. Yo le pregunté sorprendida cómo era que sabía que había sido mi día. Ella me dijo que tenía una tía que también se llamaba Esther y celebraba el ocho de Diciembre su santo. No pude por menos que quedar algo perpleja por la casualidad, así que aún con más motivo, celebrar este evento se convirtió en algo importante para mí. De hecho, le daba mucho más bombo a esta fecha que al día de mi cumpleaños.

Mi hermana, pasado aún más el tiempo, me regaló una pegatina de estas que describen tu personalidad por tu nombre, tan solo porque fue la única que vio en la que se hacía referencia al ocho de Diciembre como onomástica del mismo. Y ahí la tengo, pegada en la puerta de mi dormitorio...

Ahora resulta que, desde hace unos años, Santa Ester está contemplado en el santoral  el veinticuatro de Mayo, pero oígan, con semejante historia, ¿cómo voy a cambiar ahora la fecha? Yo lo seguiré celebrando el ocho de Diciembre hasta que me muera. Eso, si lo celebro, porque lo de las fiestas hace ya un rato que pasó a la historia. De todos modos, este año he salido a comer con mi madre y una amiga suya. Me ha dicho mi madre que hacía muchos años que no podía celebrar mi santo conmigo porque siempre he quedado con alguien. Supongo que, como ella dice, eso bueno tiene que no tenga un céntimo para andar invintando a nada a nadie, porque así no me ha quedado otra que quedar con ella. Aunque se equivoca en un detalle: lo cierto es que hoy no hubiera cambiado el estar con ella por estar con otras personas. 

Hemos comido en un italiano, hemos brindado con vino tinto (que desde anoche tenía antojo y ahora me dejó jaqueca), hemos tomado el sol caminando por el paseo marítimo y después hemos visto una película, La vida de Pi, que sabía que les gustaría. En fin, ahora, para acabar de celebrarlo, ya que ellas se han marchado, estoy escribiendo este post mientras veo por skype a mi hermana decorando su arbolito de Navidad con galletas de mantequilla (que para no desentonar ya ha adoptado ciertas tradiciones alemanas). Y así, de vuelta al origen de la tradición de mi santo: celebración casi exclusiva con mi círculo más cercano. ¿Acaso necesito más?




miércoles, 6 de noviembre de 2013

¿ALGUIEN ME LO EXPLICA PARA QUE YO LO ENTIENDA?

Sinceramnete, estoy hasta los OVARIOS de escribir penas. No marco números de teléfono, ni quedo con gente porque, hasta ahora, confiaba en que la próxima vez que alguien supiera de mí podría contar que ya pasé el bache (más bien socavón), que me habrían llamado para trabajar de nuevo en un instituto y que, por fin, renacía en mí la ilusión. Sin embargo, ha pasado un mes más y, desgraciadamente, la situación no ha mejorado, sino más bien todo lo contrario. 

He subsistido todo el verano sin ningún ingreso, tirando de los pocos ahorros que me quedaban y poniendo toda mi esperanza en la lista de interino que es ahora como una losa colgada de mi cuello, la verdad. Tras agotar la prestación de desempleo me encontré que no tenía derecho a ninguna ayuda más. No, para poder solicitar una ayuda te piden una serie de requisitos que ya me gustaría que alguien me explicara. No tengo ningún hijo a mi cargo, así que no tengo derecho... y no tengo más de 45 años, así que tampoco tengo derecho. ¿Se supone que con la que está cayendo una mujer de 40 años tiene más facilidad de encontrar trabajo? ¡¡Pues de verdad que me cuenten cómo, porque yo ya no sé por dónde tirar!! A lo mejor es que las personas de mi edad tenemos un poder oculto para hacer magia o algo así. Yo la única magia que conozco es la que me invento en mis cuentos y ya me gustaría a mí vivir en uno de ellos...

La única opción que me quedaba era el plan PREPARA una especie de subvención del fondo social europeo de recualificación profesional. Pero... ¡sorpresa! si no llevas en paro un año entero no tienes derecho a eso tampoco (y que conste que lo que te dan es una miseria, pero, claro, menos da una piedra). La cuestión es que he malvivido hasta este momento y, ahora que se cumple en mí el requisito de ser una parada de larga duración, preparé los insufribles documentos necesarios para demostrar que llevo una búsqueda activa de empleo, que es otra de las condiciones que te piden para pedir la citada subvención, y pido cita en el INEM para echar la solicitud.

Como siempre que me toca resolver algo allí, me levanto con el corazón en la garganta. Hoy no he querido darle importancia a esa ansiedad premonitoria porque, total, últimamente me despierta esa angustia antes que el despertador todos y cada uno de mis días. He revisado mis papeles, he comprobado que todo estaba correcto y me pongo en marcha dirección a la oficina de empleo (que nombre tan irónico).

Tras cuarenta minutos de agónica espera (y esto sí es culpa mía, por no llegar tarde siempre llego temprano), aparece mi nombre en la pantalla y me dirijo a la mesa 12. En menos de un minuto, mi última esperanza de recibir una ayuda por parte del estado se viene abajo. La funcionaria que me atiende tuerce la cara ante la pantalla de su ordenador y me dice con la misma malapipa de todos ellos que se me ha pasado el plazo para solicitar el PREPARA.
"¿Pero qué plazo?", le grito mientras se apodera de mí un temblor de pánico que no puedo controlar. A mí nadie me habló de ningún plazo cuando pregunté por los requisitos para la tal solicitud. De hecho, como le intento explicar, no lo he hecho antes porque me dijeron que no era parada de larga duración y sin ese requisito a mí no me lo darían.

"Claro", va y me dice la tía. "Es que el PREPARA solo se puede pedir en los dos meses siguientes a agotar la prestación, pero si lo hubiera pedido en ese plazo, no se lo hubieran dado porque no llevaba más que ocho meses en paro". O sea, que lo hubiera hecho o no  en el plazo, no tengo derecho. ¿Qué piensan? ¿Qué por haber conseguido sobrevivir sin ingresar ni un céntimo durante los últimos tres meses, puedo seguir haciendo malabares indefinidamente?

No lo entiendo, yo no puedo entender con razones lógicas que esto sea así. Lo único que me cuadra es que no hacen más que inventar requisitos rocambolescos para evitar pagar una ayuda...

Lo único que puedo es desahogarme y eso he hecho, se lo he contado a un amigo y el pobre, que tampoco le ve el sentido y que sufre en sus propias carnes mi sufrimiento, me ha preguntado hasta desesperarme aún más si estoy segura de que eso es así. ¡¡¡Tan irreal le ha parecido la injusticia!!! Pero, como yo le he dicho, ¿es que nuestro mundo no está lleno de injusticias todavía peores y son una realidad tan obvia como que necesitamos aire para respirar?

Esta misma mañana he sido testigo en directo de como a una familia le derribaban la casa destruyendo la inversión de toda una vida. ¿Por qué? Porque ellos se construyeron una casa en un terreno de su propiedad, pero el suelo no está calificado como urbanizable. Probablemente si esto que es ilegal hubiera estado más controlado desde siempre, hoy no se habrían visto en esta situación, pero antes, los ayuntamientos hacían la vista gorda... y seguramente no me pillo los dedos si aseguro que muchos politicuchos del pueblo tienen su propio chalet ilegal. Ahora, con la que está cayedo, echan la casa de una familia abajo y se quedan tan anchos. Yo estoy a favor de proteger los espacios naturales y todo eso, pero me pregunto si realmente una casa familiar dentro de una finca daña tanto a la ecología agrícola; por la misma regla de tres se debería echar abajo toda la edificación de primera línea de costa de todo el paseo marítimo de Toremolinos, por poner un ejemplo, que eso sí que es un crimen ecológico. O deberían, no meter en la cárcel, sino ejecutar in situ a los putos pirómanos que arrasan con los montes para que recalifiquen el suelo  en pos de intereses económicos de ciertos entes. No, lo que hacen es echar abajo la casa de una familia que, precisamente, decide vender su piso y volverse al campo donde pretendían vivir de forma más sostenible. En dos ocasiones los maquinistas que fueron llamados a efectuar el derribo de dos empresas diferentes, se negaron a participar en este crimen. Hoy, el empleado de una última empresa, ha llevado a cabo la órden. La pobre dueña de la casa ha arremetido contra él, lo ha insultado y le ha deseado lo peor que se le ha ocurrido, aunque, en el fondo, sabe que no es culpa del operario el fatal desenlace. A saber qué otra injusta circunstancia vive ese hombre en su hogar que le haya llevado a aceptar seismil euros por hacer lo que su corazón no querría haber hecho. ¡¡QUÉ ASCO!! ¡¡QUÉ ASCO!! ¡¡QUÉ ASCO!! 

De verdad, no sé de dónde sacar un mínimo de actitud positiva en este instante. Me da miedo decirlo, pero cada vez entiendo mejor a esas personas a las que esta desesperante situación las lleva al suicidio. ¡¿Qué clase de seres vivos somos?! ¡¡Parásitos, sin duda!!
http://multimedia.laopiniondemalaga.es/videos/malaga/20131106/derriban-una-vivienda-construida-suelo-urbanizable-alhaurin-grande-499085.shtml

Aferrándome a la música para no volverme loca: HOPE OF DELIVERANCE (Esperanza de Liberación)

jueves, 10 de octubre de 2013

CADA NOCHE...

                                                                            
               Los minutos de la noche se
                                                    acumulan insomnes,
mientras mis aciagos pensamientos pisotean, 
sin piedad, 
cada brote de esperanza que trata de enraizar
 en mi árida y agotada tierra.

 Esperando que la desazón se canse de caminar,
 para andar yo sola, 
sin su tediosa compañía y
 enredando en las sábanas pesares
 en cada vuelta desvelada, 
sin dejar de contar las horas 
para que me descubra el alba. 

¿De dónde sacaré las fuerzas mañana?

sábado, 7 de septiembre de 2013

UN ÚNICO

Un desconocido. Una de esas casualidades que ocurren por vivir en red. Comenté el estado en Facebook de un antiguo alumno al que aprecio y que siempre valoró nuestras charlas. Y al poco recibí una solicitud de amistad de uno de sus contactos, según me dijo, porque le gustó lo que escribí, y deseaba seguirme en Face.

La verdad es que son pocas las veces que admito en la red a personas desconocidas pero, tal y como le dije, no podía ser "mala gente" si era amigo de este alumno. Lo acepté, y también yo curioseé sus publicaciones. Resultó refrescante y por eso escribo este post.

Eres un desconocido y probablemente no conversemos cara a cara nunca. Aun así, me has dado las gracias por sacarte una sonrisa. Desde luego, sé muy bien el valor de sonreir hoy en día, pero soy yo la que debe darte las gracias por recordarme que siguen existiendo soplos de aire fresco entre tanta atmósfera viciada.


¿Sabes? La definición de "transgredir" es quebrantar un precepto. Por tanto, "transgresor" es el que rompe la norma.
En otros tiempos, cuando la vida estaba encorsetada y se silenciaba a los que pretendían hablar, surgieron transgresores que procuraban romper los moldes en los que se cocía al pueblo. Atrevidas ropas y peinados, canciones que denunciaban a pleno grito o en susurros... todo podía ser un símbolo al que se abrazaban los que plantaban cara a la falta de libertad. También hoy hay motivos de lucha y las masas se mueven en pos de lo que creen. Pero muchos olvidan que hoy, al menos, se puede protestar. Incluso me da la sensación de que hay gente que se aprovechan de la justificada indignación de los que levantan su voz, para descargar su violencia, escondidos, como cobardes, entre la multitud. Me da la sensación de que hay gente que ha convertido en esperpento aquel simbolismo que antaño podía haber tras la moda o la música.

Nunca me ha gustado (y no lo hago ahora) generalizar, pero lo cierto es que, por desgracia, he visto muy a menudo ejemplos donde se confunde la libertad y el derecho que cada cual tiene a decir lo que quiera, con ofender y pisotear la libertad del de enfrente; donde se confunde el hablar claro con ser soez; donde se confunde la confianza, con la falta de respeto; se confunde la posibilidad de expresar nuestra sexualidad sin tapujos y sin caretas, con el rechazo al romanticismo y a la belleza.

Así que, según yo lo veo, ya que parece que ésta es la tónica que lo empapa todo, ahora un transgresor es el que aboga por el valor de la amistad, por los buenos modales, por la familia... por el AMOR en todas sus formas. El que, como tú, a pesar de todos los sinsabores que nuestra actualidad nos está aportando, y sin mantenerse ajeno a ellos, se desvela, no obstante, por la noche y escribe un poema al amor. Y además, lo comparte con el mundo sin pudor.

Buscas hilar palabras para crear una belleza que se aproxime por un instante al sentimiento de un corazón que desborda inocencia e ilusión. Te expones a que te critiquen y resten valor o se burlen de tus acunados versos, pero no dejas de hacerlo. GRACIAS.

Puede que no te hayas fijado, pero hay algo que es indudable: puede que haya quien desprecie la poesía, pero si la critica es porque no le ha resultado indiferente. Admira pues el poder que tienes en tu pluma.

Gracias, otra vez. Eres un soplo de aire fresco que me ha hecho recordar a otros que, como tú, me inspiraron hace unos años estas mismas sensaciones. Como profesora, lo reconozco, aquel curso cometí algunos errores. Y es que, a ratos (bastantes), me sentía más como parte de una pandilla, que como la que, desde fuera, tenía que impartir unos conocimientos. A veces me lo recriminé en silencio, pero ahora puedo decir que no me arrepiento. Aquel maravilloso año yo aprendí mucho más de ellos, que ellos de mí. Estoy casi segura. Me devolvieron la fe en todo aquello que yo viví a su edad y supe que, a pesar de toda la paja que pueda haber en el saco, también hay granos de trigo que harán germinar un futuro luminoso. Y sentí orgullo de haber elegido ser profesora porque así tendré la oportunidad de participar de ello.

No hay palabras en el diccionario para expresar todo lo que agradezco haberlos conocido. Me regalaron su confianza y lloré en la despedida porque sabía que nuestros caminos nunca volverían a cruzarse para compartir un concierto improvisado en la playa, compartiendo bocatas y coca-cola.
Aquella actividad de final de curso que afortunadamente me inventé, ahora es un talismán para mí; unas imágenes a las que vuelvo para volver a ellos.

Ellos que se convirtieron en "MIS ÚNICOS". Me dijeron que estarían conmigo cuando lo necesitara y, ¿sabes?, así ha sido. No los he vuelto a ver y con pocos sigo en contacto de vez en cuando, pero me llenaron el corazón de tanto amor que solo me hace falta pensar en ellos para sentirme mejor, tomar impulso y seguir adelante. Gracias desconocido por recordármelos.

Gracias Ismael, tú también eres "UN ÚNICO".


jueves, 5 de septiembre de 2013

ENDOSPORA

Ciertas bacterias tienen la capacidad de generar una estructura interna extremadamente resistente que sobrevive a un medio adverso. Simplificando mucho la cosa, cuando la bacteria se encuentra en un entorno hostil, repliega su información genética y crea una capa a prueba de casi todo a su alrededor. Es como si se sometiera a un proceso de hibernación. Cuando las condiciones del medio son favorables, se reactiva el metabolismo y la endospora germina restableciéndose las función celular. ¡Fantástico!

Llevo unos días con esa imagen en mi cabeza. Llevo esperando y desesperando prácticamente un año entero, por fin ha llegado Septiembre y estoy a la espera de que se abran las listas de interinos, confiando en que este curso voy a volver a trabajar. No quedan muchos días para la dichosa lista comience a funcionar y ahora que queda tan poco, he notado como mis niveles de ansiedad se han incrementado hasta cotas inauditas. Somatizo esta tensión. Mi preocupación por el futuro inmediato está causando estragos en mis funciones vitales básicas, así que bien podría mi organismo entender que estoy ante un medio hostil y replegarse hasta el ostracismo de una endospora hasta que las condiciones ambientales me sean favorables. 

Pero, claro, somos complicados y complejos seres humanos. En nosotros las cosas no son así. No, nosotros no podemos retraernos en nuestra cueva porque sabemos que la vida en el exterior seguirá adelante y repercutirá, queramos o no, en nuestro yo. O sea, no tenemos modo de escondernos. Huir solo sirve para retrasar lo inevitable, pues vayas donde vayas o te escondas donde te escondas, los problemas van a perseguirte hasta que les hagas frente. 

Tanto te repiten por ahí que hay que tener visión positiva que me he repetido durante todo el verano que todo va a ir bien, que voy a ser llamada y que esta racha va a pasar ya, ¡ahora mismo! Pero, no sé si lo hago bien, me refiero a eso de tener pensamiento positivo. Es que hay veces que me lo creo de verdad y otras en las que solo lo digo, pero el vértigo que siento por dentro no es nada positivo, más bien es pura y simplemente un acojone de los que descomponen el vientre. Entonces, voy y me pregunto: si no estoy siendo positiva, ¿no me irá bien? ¿No me van a llamar? Esto todavía me hace sentir peor, porque si no me llaman será culpa mía por no haber tenido pensamiento positivo. ¿Os dais cuenta de por qué me jode tanto que la gente me inste a "ser positiva"? 

Tengo miedo, tanto que estoy paralizada. Ya no es solo por falta de medios económicos, es que cada vez que pienso en salir a la calle me invade una agorafobia del quince. Hasta hablar por teléfono me cuesta y me pongo nerviosa cada vez que algún bienintencionado amigo me propone ideas para encontrar un trabajo. ¿Qué pasa? ¿Es que tampoco cree que me vayan a llamar para trabajar este curso? No es que me haya vuelto pija de repente y me niegue a hacer trabajos que están por debajo de mi capacitación y cualificación. Es cierto que pensar en eso me hace sentir fracasada, porque ya tengo cuarenta años, una carrera y dos oposiciones superadas, y parece que todo el esfuerzo no sirvió para nada, pero eso no me impediría hacerlo. Lo que pasa es que admitir que tengo que buscar "lo que sea" es acabar con el último ápice de pensamiento positivo sobre lo que me deparará la lista de interinos. Así que estoy bloqueada, parada, desesperada. 

A pesar de no ser una bacteria y no poder formar una endospora que me proteja de todo, siento que estoy aislada, me he aislado voluntariamente para que ningún comentario pueda hacerme daño. No más que el que me hace sentirme tan sola. 

Y, si se trata de ser positiva, confío ser endospora y que, por tanto, mi estructura defensiva sea temporal. Que las condiciones ambientales cambien pronto y pueda reactivar mi metabolismo social. La endospora no pierde la esperanza. Existe para germinar.

viernes, 23 de agosto de 2013

ESA BOLITA DE PELO

Anoche mi amiga Reme me mandó este simpático dibujo con esta acertada frase:

Ella sabe que no puedo estar más de acuerdo. En este blog, cada pedacito de mi camino está acompañado de una canción, las melodías que van tejiendo el concierto de mi vida. Y, por supuesto, y aunque hasta ahora no le haya dedicado ninguna línea, mi Gea. 

Llegó a mí hace poco más de siete años y ahora se me hace difícil pensar en vivir sin ella. No es una gata demasiado sociable; algunos incluso diréis que no lo es en absoluto. Pero eso es con la gente. Cuando entre estas cuatro paredes no hay nada más que mi gata y yo, ella es mi momento de ternura. Da igual qué esté pasando, tanto si estoy feliz, como si lloro por dentro, mi  bichito saca siempre lo mejor de mí. 

Me gusta mirarla cuando camina, cual fuambulista, esquivando con su elegancia felina cualquier objeto sobre mis muebles. Me gusta mirarla cuando se hace un ovillo sobre su cojín y cuando de repente se recoloca panza arriba para que le acaricie. Me gusta mirarla cuando se estira sobre el suelo tras sus eternas siestas. Me gusta mirarla cuando su instinto cazador juguetea con algún insecto que se  cuele por la terraza. 

No creo que a un gato se le pueda enseñar nada, ellos aprenden lo que les interesa aprender. Nosotros somos los que nos adaptamos a sus hábitos y no al revés. De eso estoy segura. Yo no puedo salir de casa sin dedicarle antes a ella su ratito de atención. Y es que sabe muy bien cómo hacerlo. Al final, quiera o no quiera, siempre salgo por la puerta con una sonrisa porque, a pesar del tiempo, nunca deja de sorprenderme su tan bien estudiado teatro: Unos maullidos lastimeros, buscar mi pierna para rozarse con ella zalamera, tumbarse en el suelo lomo arriba pidiendo que la rasque, y si nada de eso funcionara, ponerse delante de la puerta impidiéndome el paso. Imposible  eludir su insitencia. Suelto el bolso y corre hasta subirse al sofá sabiendo que ya ha ganado, que me sentaré unos minutos para que se ahueque en mi regazo. ¡Cómo no sonreir!

Por eso, a pesar de lo triste que a veces pueda estar, ella me ha obligado a aprender a levantarme y que lo primero que salga por mi boca sea un sonido agradable: los buenos días que le dedico al verla desperezarse junto a mí. Lo mismo que al despedirme cada noche. Ya no logro dormir si  ella no se acurruca a los pies de mi cama tras darle un achuchoncito cariñoso.

¡Cuánto ocupa su silenciosa compañía! ¡Cuánta paz me da!

lunes, 29 de julio de 2013

NO HAY DOS SIN TRES: OTRA VISITA A ALEMANIA

Esta vez acompañada de Irene García. Para ella, la segunda vez.

Me he estado peleando con mi ordenador los últimos tres días y, por fin, hoy, tras unas cuantas horas de entretenimiento y calor, he terminado mi pequeño reportaje para recordar esta semana junto a mi hermana. Un resumen de menos de catorce minutos de una semana estupenda. Lo único que refleja este tiempo es lo corto que se me ha hecho el viaje. 

En fin, mi ordenador está cargado de un montón de fotos que no he utilizado en el pequeño vídeo por no aburrir; pero ni el montaje, ni las más de doscientas imágenes archivadas llegan a acercarse a la cantidad de cariño que me traigo y te que te dejo.

(Como siempre, a los españoles en Alemania que no podrán verlo desde este enlace, os lo haré llegar de otra forma).

sábado, 13 de julio de 2013

45 R.P.M.

Os acordáis, ¿no?...

Cualquiera que haya vivido en la era del long play sabe a lo que me refiero. Poner un disco y equivocar las revoluciones y escucharlo en versión Albin y las ardillas, a toda pastilla y sin frenos. 

Esta noche, más bien madrugada....casi amanecer, tengo esta visión sobre mí misma: soy un disco de 33 sonando a 45 r.p.m. Si bien soy ya una persona habladora, llevo unos días en los que la incontinencia verbal me deja KO la sinhueso. Tanta saliva estoy forzando a fabricar que me siento dashidratada y, si hasta yo misma me quedo exhausta de no parar de soltar por esta boquita, miedo me da pensar en los pobres oídos que me están escuchando. ¡Por Dios, amigos, páradme! No os cortéis, que si no lo hacéis vosotros no podré hacerlo yo. ¡Uff! 


Lo tremendo es que no hace ni una semana estaba confinada en casa sin deseo de cruzar palabra con ningún ser humano. En tres días, desde que me levanté hasta que me acosté, me tragué los ciento quince capítulos de Candy Candy. ¡Sí! Como lo oís. Tremenda y paranoica terapia de choque. Expulsé en lágrimas el equivalente a las Lagunas del Ruidera, como poco. 

No es la primera vez que siento que vivo en una noria, pero vaya, en esta ocasión es más bien una montaña rusa, que la noria se mueve suave y no es suavidad precisamente lo que estas fluctuaciones anímicas me sugieren. De dormir más horas que un gato, cayendo casi en un coma profundo, a no conciliar el sueño más de cinco horas con suerte, y, además, hacerlo como los delfines, con uno de los hemisferios cerebrales bien despierto. De no tener fuerzas ni para respirar, a escapárseme la energía por los poros notando como la tensión agarrota mi mandíbula hasta en los escasos momentos en los que consigo pegar los párpados. ¡Joder! Parece que me hubiera metido una raya. No debe ser muy distinta la sensación, así que ahora entiendo aún menos a los que consumen porque, bajo mi punto de vista, no es nada agradable sentir que el corazón te pide más espacio de lo que tu caja torácica le da de forma natural.

Inspiro fuerte y exhalo sonoramente. ¡Qué alivio! Es que se me olvida respirar llenando a tope los pulmones. Otra consecuencia de este subidón de adrenalina que seguro está intoxicando mi sangre en estos momentos. ¿Os dan miedo las montañas rusas? Hay quien disfruta del vértigo y la velocidad. Os confieso que yo no. Nunca me subo a esos trastos. Alguna vez lo hice, claro, si no no tendría en mi memoria que no lo disfruté, pero ya no lo hago. Sin embargo, aquí estoy, montada en una y en lo más alto, sabiendo que, por tanto, la inminente caída será más acusada y, por supuesto, más vertiginosa. Y sabiendo que no disfrutaré la sensación.

Equilibrio, paz, busco desesperadamente la asíntota en la gráfica de mi existencia. Claro que no tiene mucho sentido mezclar en la misma frase la búsqueda de la armonía con la palabra desesperación. Dudo que así lo consiga. Y esta es otra: las cosas de las que soy consciente que no hago bien y de las que soy consciente que debería hacer por mi bien y que, sencilla y llanamente, no puedo. Es como si a alguien que lleva perdido tres días en el desierto le ponen una botella de agua fresca a su lado pero estuviera atado de pies y manos impidiéndole alcanzarla. No imagino peor tortura.

Son casi las seis de la mañana. he decidido hace escasamente un minuto que, en vista de que, más pronto que tarde, caeré en barrena, mejor será que aproveche el subidón. Lo siento por los que tenéis que aguantar mi torrente lingüístico, de veras, si llego a ser irritante, largarme ese "por qué no te callas" que tanto resultado le dio al Rey. Os doy permiso. También he decidido que, en vez de volverme loca en la cama dando vueltas, era de recibo aprovechar el tiempo desahogandome vía cuaderno de bitácora y creo que, además, voy a hacer algo que hace mucho, pero que mucho tiempo que no hago: me voy a ir a la playa a ver amanecer. Quizás así libere una de mis manos y consiga alcanzar la botella y beber, aunque sea un sorbo, del sanador líquido.

Un rato más tarde:
 

domingo, 30 de junio de 2013

NOSTALGIA EN VIVO

Para finalizar el mes: música y nostalgia.

Anoche me fui de concierto y algo más, un viaje en el tiempo, tal vez. Confieso que no fui en su día una gran fan de ninguno de los grupos que tocaron ayer en Mijas, pero, muchas de sus canciones, como no, forman parte de la banda sonora de mi adolescencia, así que disfrutar del directo ha sido, nuevamente, un momento mágico.

Cada cual vive las cosas a su manera. Yo creo que, sin querer, anoche me desmarqué un poco de mis acompañantes, porque, la verdad, desde que empezó a tocar La Guardia, yo viajé a Pinarillos, el campamento del 89, y a una piscina en Tolox, y a las primeras discotecas, las fiestas del instituto... a tantos y tantos momentos compartidos con otra gente... Otra vida me parece ahora.

Pero lo bueno de sentir nostalgia mientras vives un concierto, es que no tienes tiempo de pensar que aquellos tiempos fueron mejores, porque el mismo presente lo está siendo mientras coreas los estribillos, levantas las manos y aplaudes, dejándote la voz.

¡Qué buen sabor de boca! ¡Y qué dolor de pies! Pero, ¡qué más da eso! Un bajo precio a pagar por vivir cuatro horas de felicidad.
Así lo vimos:
Y así lo sentimos:

lunes, 24 de junio de 2013

BAJO EL INFLUJO DEL SOLSTICIO DE VERANO

   En la noche del veintitres al veinticuatro de Junio, como es bien sabido por todos, celebramos la Noche de San Juan. Mucho antes de que existiese esta tradición cristiana, ya se celebraba la llegada del verano: el Solsticio de Verano, que es unos días antes, el veintiuno. Es el día más largo del año y da comienzo  la esperada, por tantos, época estival. 

   Sea lo que sea que cada cual prefiera celebrar según sus creencias, lo cierto es que nos hace coincidir en el sentimiento de que la Magia se hace presente y todo cuanto deseemos en la hora de las hogueras puede hacerse realidad.

   Las hogueras. Esta fiesta está vinculada al fuego por dos motivos. En un principio se encendían hogueras con el propósito de dar más fuerza al Sol. Además, el fuego es considerado como elemento purificador para quien lo contempla. De la misma forma, el agua es vida y es limpiadora. En San Juan, aunamos estos componentes en una receta de ilusión y esperanza.

   Para mí es la fiesta que más me gusta celebrar. Hace años, las moragas hasta el amanecer... ahora, de manera más tranquila, incluso como anoche, que poco después de cumplir con nuestra ceremonia particular, nos retiramos a descansar pues esta mañana teníamos obligaciones ineludibles. No obstante, no se puede faltar a San Juan.... Aunque estés en un pueblo de Alemania donde no se celebra. Me consta que mi hermana se levantó cerca de las doce de la noche para encender una vela en su balcón, quemar con ella sus deseos y estar así conectada a lo que aquí nosotros también hacíamos, solo que junto al mar...

   A mí me acompañaron mi amiga Irene y mi nuevo amigo Paco. Para ellos en especial, para todos en general, este pequeño montaje que, como siempre, es una forma de recordar una ocasión especial.

sábado, 1 de junio de 2013

SOLUCIONES. I FEEL GOOD

 He aprobado el inglés... y, después de todo, parece que voy a poder ir al musical. Mis maravillosos amigos me compran una nueva entrada para otro día y además mi amiga Irene se apunta a venir conmigo. Según ella deberíamos ir el día 27 porque quizás si me equivoqué con el día sea una señal de que tenía que estar allí en ése y no en oro momento... Bueno, yo no sé si será como ella dice o no, pero, en cualaquier caso, si podemos sacar las entradas para ese día lo haremos, que cae en sábado y después nos quedaremos de marchuqui, que bien merecido me lo tengo.

I feel good!!!
Por cierto, añado este vídeo porque me ha encantado el montaje de esta tocaya mía.

viernes, 31 de mayo de 2013

CALAMIDADES DE MAYO (EL ÓRDEN DEL MUNDO)



    Hace un mes celebraba mi cumpleaños... En la tarde del día treinta de abril llegaron mis amigas de Almería para festejar conmigo y con amigos de aquí, desde la noche, mi cuarenta aniversario, que como ellas dicen, solo se cumplen una vez. Y como ya os comentaba, muchas ganas de celebrar no es que tuviera, pero agradecí y disfruté  la compañía. Cuando 24 horas más tarde, las almerienses se despedían de mí, me quedé sola en casa con sueño, mis primeras dos canas teñidas en la cabeza, pero con un buen sabor de boca. Nada me hacía sospechar entonces los "otros regalitos" que me esperaban en el mes de Mayo. Esa noche, al acostarme, pensaba, tal y como escribí, que gracias a momentos como los que viví ese día, se compensan los malos ratos ... ¿De verdad?

   Bueno, siento una vez más que me gustaría borrar directamente este año de mi vida, al menos esta primera
mitad está siendo horrible en todos los sentidos. Aún así, quiero aferrarme a la esperanza, por más que me queje, despotrique y rabie, y quisiera creer que el uno de Junio, al cumplirse el meridiano anual, se produzca un punto de inflexión kármico por el cual todo va a empezar a ir de bien a mejor.

   No obstante, si no quiero acabar con una úlcera de estómago, más vale que me desahogue. En numerosos momentos he querido hacerlo en este hueco durante el mes, pero, me daba pereza volver a escribir sobre penas. Ayer, que por fin, hizo un buen día de Sol, me quité por enésima vez esta idea de la cabeza, y me dije que mejor me iba a disafrutar de la playa, que ya estaba superado todo el mes y que mejor olvidar... Aunque, al levantarme y tras ponerme el bikini (horrorizándome una vez más de lo que la ansiedad ha provocado en mis carnes), me llevé el susto de mi vida. Al preparar la mochila y buscar el monedero en el bolso habitual, me di cuenta de que no estaba y por más que la busqué no la encontraba. Teniendo en cuenta que mi situación económica es pésima, no es que me preocupara mucho por la cantidad de dinero que llevaba encima, el problema era perder el carné de identidad, el de conducir, la tarjeta sanitaria, la tarjeta de crédito y unos cuantos documentos más. O sea, un follón de tener que renovarlos. Pero, tuve la intuición (basada en una experiencia anterior) que podría habérseme caído en el coche, como dos minutos más tarde pude constatar. Así que di sinceramente gracias a Dios y puse el coche en marcha de camino a la playa con la sensación del que vuelve a nacer. Me dije incluso que la "malcición de Mayo" ya se había roto... ¡Incauta! Todavía quedaban dos  días por delante para que este primaveral mes me dejara su sello.

   Pero empecemos por el principio... El uno de mayo fue miércoles... Vayamos hasta el primer lunes del mes, y, a partir de aquí cada principio de semana se ha convertido en una lista de calamidades (probablemente exagere, pero cuando llevas a tus espaldas un añito del copón, todo se magnifica, como dirían los del Gran Hermano).

   Nos roban en el campo. Y no una, sino dos veces. La casa está alquilada por una pareja con la que además estamos muy contentos porque tras algunas malas experiencias con anteriores inquilinos, éstos están cuidando el terreno y desean hacer de él un hogar. También es una tranquilidad que la casa esté ocupada, puesto que en otras ocasiones han entrado los ladrones y pensamos que era por parecer deshabitada. Pues no, nos equivocamos, la gente que quiere robar lo hace haya o no haya gente viviendo dentro. Supongo que estudiarían  durante algún tiempo los horarios de la pareja y aprovecharon su jornada laboral para entrar en la casa. La primera vez robaron todo lo que tenían de valor: la TV, sus cámaras de fotos, etc. La segunda vez, como ya no encontraron nada de eso, arrasan con ollas, hornilla y hasta las rejas de las ventanas (suponemos que para vender el hierro). La pareja regresa a casa y los pilla "in fraganti", pero los destrozos ya están hechos. Tan tranquílamente se encontraron mientras robaban, que hasta se dedicaron a comer y a fumar.

   Además de los consecuentes gastos que esto supone en cuanto a arreglos, lo peor es que nos quedamos sin inquilinos. Lógicamente están asustados. Así que son 400 € mensuales menos en las empobrecidas arcas familiares. Gracias a yo qué sé qué, a mi madre no la dejan de llamar preguntando para alquilar, así que esperamos que pronto vuelva a estarlo y confiamos que la policía coja a los rumanos que robaron. No obstante, para volver a poder alquilar aquello, ahora hay que tener un "Certificado de Eficiencia Energética". Esto es por una nueva ley que se establece debido a los acuerdos del Protocolo de Kioto (o sea que en realidad debería estar vigente desde 1997, pero es ahora, en el peor año de nuestras vidas, cuando tiene que entrar en curso...), en definitiva, costará unos 300 €. Suma y sigue.

   Después de este marrón, que ya hubiera sido suficiente palo para un solo mes, recibo una notificación de la Marina. Se me emplaza a presentarme en sus oficinas de Fuengirola durante siete días consecutivos para demostrar que estoy en paro y no defraudo al recibir mi prestación por desempleo.

   Cuando llamo para enterarme de todo esto y pregunto por qué se me convoca, me dicen que es un control rutinario que se realiza al azar (igual debería plantearme meter a la lotería). Y tras contarles que no cojo el coche más que para lo imprescindible por no gastar ni un céntimo, parecen apiadarse de mí y me dicen que no hace falta que vaya a Fuengirola, que lo haga en mi oficina del INEM de Benalmádena. Encima de sentirte fracasada por no tener empleo, te hacen sentir más humillada aún haciéndote comparecer cual reo en tercer grado. Para colmo, mi ansiedad y  mi depresión llegan con esto a tal punto que antes si quiera de llamar e informarme, como después hice, lo primero que se me ocurrió fue ir a visitar a mi ex-jefe en el barco, porque no entendía nada de lo que esa carta llena de términos jurídicos decía y solo imaginé mil y una mala consecuencia por haber trabajado aquellas semanas de Octubre con ellos. Y, aunque nunca estuvo en mi intención reprocharle a él nada, eso justamente debió parecer por mis formas. Me fui a mi casa, además de nerviosa y frustrada, sintiéndome como el culo por mi modo de comportarme. Por supuesto mandé un mensaje horas más tarde para disculparme, pero lo cierto es que ahora me da vergüenza pasar por allí, esa es la verdad.

   En  fin, volviendo al tema del sellado. Yo entiendo que paguemos justos por pecadores, que debido a la picaresca de algunos, se deban instaurar formas de control para descubrir fraudes en beneficio de los que somos legales... Pero, si esto me podía servir de consuelo y tranquilidad, pensando que el sistema funciona, nada más lejos de la realidad. Confieso que no me he atrevido a plantear en el INEM mis serias dudas en cuanto a su forma de intentar descubrir el fraude, y es que no son precisamente afables los maravillosos funcionarios que allí nos atienden, y no quería tener más problemas, que visto lo visto, no es cuestión de provocar a la suerte. Pero la cuestión es que te joden durante siete días haciéndote ir a la hora de la mañana que a ellos les da la gana cada día (y vuelvo y repito, agradecida de que no me hayan hecho ir hasta Fuengirola). Mi primera pregunta es: Y si el que trabaja en negro mientras cobra el desmpleo, lo hace por la tarde, ¿qué? ¿Puede defraudar tranquilamente? Eso parece, porque por las tardes en el INEM no trabaja ni Dios.

   Se supone que tienen que comprobar que el que va a sellar es quien cobra la prestación, pero os aseguro que en ninguno de esos siete días de esta obligada penitencia he mostrado, ni me han pedido que muestre, mi carné de identidad. Igual podía haber ido mi madre por mí, o incluso un amigo travestido. Ni me miraron a la cara.

  
Tampoco llegué nunca a la hora que me citaban (siempre llegaba bastante antes... es una mala costumbre mía, soy impuntual por defecto). Pues tampoco miraron el reloj, que se supone que te cambian la hora para supuestamente abarcar distintas franjas laborales ( a excepción de la tarde, claro). Bueno, el penúltimo día sí que la chica se dio cuenta de que era más temprano y me hizo esperar... Imaginé que la muchacha tenía un mal día y quería tocar los cojones a alguien, igual que, probablemente, alguien se los estaba tocando a ella. En cualquier caso, me fui corriendo al parquímetro, que ese día concretamente no llevaba suelto y no pude poner el ticket antes. Ya que tenía que esperar, decidí no correr el estúpido riesgo de que me pusieran una multa por esta gilipollez. Volví a la una y sellé como en los días previos.

  
Entre tanto, mi madre me vuelve a llamar para contarme que ha recibido a la inspección del gas y se lo  han precintado aduciendo que la instalación incumple la normativa... ¿Perdón?  Hace ya un montón de años que tenemos el gas y cuando la empresa instaladora hizo su trabajo todo estaba bien. Y no porque ellos lo dijeran, sino porque tras esa instalación, la inspección tuvo que dar su aprobación, y así lo hizo. Posteriormente, han habido otras revisiones y la instalación seguía estando bien... Y ahora, de repente, todo estaba mal desde el principio... ¿Cómo puede ser? Mi madre llamó a la empresa instaladora, obviamente, y como es lógico pensar, si esta empresa no llevó a cabo bien la instalación, lo suyo sería que arreglasen el problema, ¿no? Pues sí, efectivamente lo hacen....: nos mandan enseguida unos técnicos para que NOS HAGAN EL PRESUPUESTO. Escuchando a mi madre, la sangre me hervía por cada una de mis arterias. "¿Cómo va a ser esto así?", le pregunté. Mi madre me contó que la empresa instaladora da como respuesta que han cambiado la normativa. ¡¡Uff!! Esto huele a timo que apesta. Animo a mi madre a que se ponga en contacto con la oficina del consumidor y tras algunas gestiones confirmamos que eso de que haya cambiado la normativa desde que pusimos el gas no es cierto. La cuestión es que la empresa instaladora y la inspección trabajaban conjuntamente y ahora la inspección trabaja con otra empresa de la competencia. Conclusión: Una forma de sacar pasta a costa de incautos que caigan en el timo. Yo no lo puedo explicar de otra forma. Me abstengo de dar los nombres de las compañías a las que aludo, pero tan solo porque los desconozco y ya es tarde para llamar a mi madre y preguntarle. Pero espero que cuando ella lea este post, lo comente indicando estos nombres, para que si a alguien le pasa algo parecido le pueda servir nuestra experiencia. 

   Sea como sea, es cierto que la instalación está mal hecha, así que habrá que arreglarlo, más que nada por la seguridad de los que viven en la casa y demás vecinos; sin embargo, lo de pagar la reforma, está por ver, por supuesto, porque desde luego lucharemos por no hacer lo que consideramos una estafa. Claro que, igual el dinero que no paguemos en esta obra, lo tengamos que pagar después en abogados... ¿Sigo?

   Por fin llega el martes 28 de Mayo. El anterior lunes me liberé del examen de That´s English para el cual estudié a trancas y barrancas con todo este follón en la cabeza. Y llegó el último día de sellado en el INEM. Pensé que si el lunes no había pasado nada malo esta vez, tal vez se había acabado las semanas de mala racha (dentro del año de mala racha). Para reafirmar este pensamiento, me hacen un nuevo encargo de cuento en el momento idóneo, "¡perfecto!", pensé, "justo en el momento en el que me libero de mis obligaciones. Podré dedicarme a escribir sin problemas".

   Y eso hice ayer miércoles: me fui a la playa donde me inspiré y escribí e imprimí mi cuento en un solo día.  Hoy jueves subiría a Málaga con mis amigos Carlos y Fernando al cumpleaños de nuestra otra amiga Reme, y aprovecharía el viaje para llevarle el cuento al cliente... y así ahorrar unos céntimos en gasoil.

   Así que esta mañana, bajo a encuadernar mi cuento a mi papelería habitual... Cinco minutos, cinco únicos minutos. Eso es lo que he tardado en la papelería. Al volver al coche, una multa por mal estacionamiento. No me he dado cuenta de la señal de carga y descarga. ¡No me lo puedo creer! A veinte minutos de que expirase la franja horaria en la que la señal está vigente... Si hubiera dormido bien, el despertador  hubiera sonado treinta minutos más tarde; pero harta de dar vueltas en la cama, me levanté esta mañana antes de lo previsto y mi planificación se adelantó en todo. ¿No es para mondarse? ¿Quién dijo que a quién madruga Dios le ayuda?

  
Para colmo, tengo la plena seguridad de que el señor guardia me vio aparcar mal y pudo indicarme que allí no debía hacerlo. Pero claro, esto hubiera sido comportarse como un agente de la autoridad, y no como un recaudador del ayuntamiento. Que, desde luego, lo que se dice multar porque molesta al tráfico no es lo que los  municipales quieren, y la muestra de que esto es así ses la infinidad de veces que me he encontrado un coche patrulla estacionado en medio de la calzada dificultando el tráfico, o a policías motoristas adelantando  por la derecha poniendo en peligro al resto de los conductores, pero claro, si son ellos lo que infringen las reglas, no pasa nada: son la autoridad, ya se sabe. Para mí, unos chulos (y lo siento por los que no sean así, que no me gusta generalizar...). Pero bien sabéis muchos que es cierto lo que digo. ¡Qué lástima no haber tenido en esas ocasiones la buena costumbre de hacer fotos cuando he sido testigo de estas infracciones y denunciarlas, al menos, en las redes sociales! A partir de hoy me voy a tomar esta tarea como un hobby. 

   Aunque, desde luego, la multa la he pagado, claro, no ha habido más remedio. Y además he puesto la tranferencia en cuanto he llegado a la casa, que más vale pagar 100 € por pronto pago, que no 200 € que es como está tipificado eso de aparcar mal. (Observese que una multa por exceso de velocidad puesta por la guardia civil no llega a esta cifra...ahí lo dejo). El resumen de la mañana es que he ido a encuadernar un cuento por el que de ganancia neta me llevo 15 €  y me ha costado la tarea 100 €. ¿Podéis hacer la cuenta de cuantos cuentos he de escribir para compensar esto?

   Tras pagar la multa y escribir este post hasta justamente la última cuestión retórica que os planteaba, decidí hacer caso a mi madre y dejar de pensarlo. Esta tarde, como tenía pensado, iba al cumpleaños de Reme y estaba dispuesta a pasar un buen rato con gente a la que quiero mucho. Como le he dicho a ella cuando me ha preguntado cómo estaba, no tenía ganas de hablar de mí. Entre bromas le he contestado que ya se enteraría de cómo me ha ido últimamnete cuando leyera esta entrada. Quería disfrutar de ver su reacción ante nuestro regalo, y de la estupenda tarta que nos ha preparado. No ha tenido precio ver su emoción y la de Pedro, su marido, al leer el cuento que escribí para ella a petición de Carlos y Fernando. Hasta ahora no había visto personalmente el impacto de uno de mis cuentos y se me ha henchido el pecho y me han asaltado las lágrimas por mi propia emoción siendo testigo de la suya. Realmente un momento de felicidad entre tanto mal día... 

   Pero, más tarde, hablando de nuevo de la celebración de mi cumpleaños, hace ya justo un mes, le
comento a Reme lo que Carlos y Fernando me regalaron a mí: Una entrada para el musical de La Bella y la Bestia. Creo que, sin desmerecer los otros regalos que recibí, fue lo que más ilusión me hizo. Tengo marcado el día en el calendario, junto a mi cocina y cada día paso las páginas hasta Julio, para ver la señal. Les comento: "Me voy a Alemania y cuando vuelvo, el día 27, el musical". Mi gozo en un pozo al escuchar a Carlos decirme que no es el 27, que es el 23. "¡No!", casi grito. Elegí los días del viaje para que no me coincidiera con el musical y además pensé que resultaba perfecto, pues mi hermana no tenía otra semana para recibirme. ¿Cómo he podido equivocar el día? Le pedí a Carlos que guardara él mi entrada, junto con las suyas, pero juraría que cuando la vi aquella noche vi claramente que era el 27... No se permiten cambios ni devoluciones. Asunto zanjado. Por más que maneje la pluma, os aseguro que no os puedo expresar lo que se me ha roto por dentro al ver como mi regalo se ha desvanecido entre mis dedos. No es solo que me pierda el musical, es que este último percance ya ha sido la gota que colma el vaso. 

   Al final esto ha desencadenado que le cuente a Reme todo lo que ha ido pasando este mes y que aquí os relato y sé que a ella no le supone ninguna molestia que me haya desahogado allí, en su merienda de cumpleaños, pero no me siento muy bien porque mi idea, como ya dije, era olvidarme por un rato de todo esto. Aunque, desde aquí, una vez más mi agradecimiento, porque creo que lo necesitaba, igual que ahora necesito verterlo aquí. No pretendo que nadie me solucione nada, porque es imposible, y tampooco pretendo compasión porque sé que hay gente que aún está pasándolo peor. Tan solo escribo por la misma razón que llamo a mi madre para protestar por todo lo que me indigna, porque si no lo hago, acabaría, como ya anoté al principio, con una úlcera o quizás con algo mucho peor.

   Aún queda un día más para acabar este nefasto mes. A esta hora ya estoy en el día 31. He pensado muy seriamente en quedarme en casa hasta que llegue Junio, pero, me temo que de nada serviría. A las doce de la mañana tengo que ir a recoger los resultados de mi examen del lunes. ¡¡¡Lo hice el lunes!!! Aún puede ser que hasta lo tenga suspenso. "A priori" lo creo improbable, pero estando aún en Mayo, mejor me calló y me encomiendo a todos los santos antes de salir. Ya os contaré qué pasa, no os preocupéis, si habéis llegado a leer este post hasta aquí, no os dejaré con la incertidumbre.

   Ahora que, pase lo que pase con el examen, por la noche me voy con Carlos a ver el espectáculo de "Dos hombres solos sin punto com ni na´" . Espero y necesito que me provoquen otra vez dos horas y pico de risas descomunales. Cuando compré la entrada me sentí culpable de gastarme 7,5 € cuando vivo tan ajustada, pero como comprenderéis, habiendo tenido que pagar 100 € por un error de cinco minutos, me paso la culpabilidad ahora mismo por el forro.

  
¡Se me olvidaba! Mientras esperaba esta tarde a que me recogieran Carlos y Fernando, algo me cayó en la cabeza. Un pájaro se lanzó hacia mi pelo y se enredó en él. Me llevé un susto del carajo, pero cuando al fin saltó al suelo, lo rescaté. Es un agaporni que seguramente se habrá escapado de su casa. Un joven incauto en busca de aventuras sin saber defenderse en el mundo exterior. Es muy bonito a pesar de su plumaje sucio por los días que habrá pasado a la interperie. De camino a casa de Reme no se ha separado de mí y, en cuanto hemos llegado, Carlos le ha comprado una jaula preciosa y comida. Se ha lanzado al comedero como un tigre y hemos decidido que su nuevo hogar será la casa de Carlos y Fernando. Por supuesto iré a verlo. Le hemos llamado Silver. Y, ¿sabéis qué? Cuando le he visto comer con fruicción me he imaginado lo bien que debía saberle ese alpiste después de haber estado perdido estos días. Así me voy a sentir yo cuando supere este bache. Y aunque ahora me parezca imposible, quizás ese pajarillo ha venido a mí para decirme hoy que llegará, que el día en que me "salve" llegará pronto.




viernes, 17 de mayo de 2013

SUCEDÁNEO DE ARROZ CON LECHE

Hace ya algún tiempo que no subo ninguna recetilla, y es que ando atareada, como ya sabéis, escribiendo cuentos, así que he dejado un poco de lado esta parte del blog. No obstante, el otro día me apetecía algo dulce que no me diera después mucho sentimiento de culpa, así que me puse a preparar este arroz con leche light: sin azúcar, con leche desnatada y ¡sin arroz! El truco está en cambiarlo por copos de avena. Para mí, que soy famosa por mi estreñimiento, ésta es un agran solución para disfrutar de arroz con leche, porque, al contrario que el arroz, la avena tiene muchísima fibra, así que, he matado dos pájaros de un tiro. Y os aseguro que el sabor es el mismo y la textura está muy conseguida. Animaos a probar. Aquí os dejo la receta.

SUCEDÁNEO DE ARROZ CON LECHE on Tildee



Para ver otras recetas, visita la sección "A comer grumetes"

miércoles, 1 de mayo de 2013

CUARENTA TACOS AL SACO

Las nueve de la mañana, pero despierta desde no sé exactamente qué hora gracias al sonido de un móvil de una de mis queridas visitantes...

 A juzgar por la pesadez de mis párpados y el tembleque, que si bien ayer se limitaba a las manos hoy ya es generalizado en todo mi cuerpo, no habré dormido más de dos horas. Y teniendo en cuenta de que ya ayer fue un día post-noche-de-insomnio, pues nada, ¡que estoy hecha un vendo!

Pero, es mi cumpleaños, mi CUARENTA CUMPLEAÑOS (aunque me da yu-yu lo pongo en mayúsculas y en negrita, ¡toma ya!) , y aunque tenga que hacer un esfuerzo por encontrar en estos días algo positivo, hoy lo haré. Desde anoche estoy arropada por el calor de algunos amigos y tener esto es ya un motivo para sonreír hoy. 

Es curioso esto de los amigos, ¿eh? Se cumplen años y cada vez conocemos a más y más gente. Ahora, con las redes sociales, el que no tiene más de cien amigos es un rarito... Pero, lo cierto es que no hay tantos que lo sean de verdad... De hecho, anoche, alrededor de la mesa no había mucha gente, aunque eso sí, era una reunión de gente muy importante. Consiguieron que sonriera y hasta se escapó más de una carcajada desde lo más profundo de mi alma... ¡Y que bueno es reírse así de vez en cuando! El otro día ya no me acordaba de cómo se hacía...

No quiero ser injusta, sé que en esa cena aún podría haberse sentado un puñado más de gente a la que quiero y me quieren. Aún así, mi realidad, como os decía, es que con los años, los buenos amigos no sobran, pero los que lo sois habiendo yo llegado a los cuarenta llenáis mi corazón de orgullo. Os quiero y os lo quiero decir ahora mismo, para qué esperar. Ya sé que el día de mi cumpleaños está casi sin estrenar y por ahí me tienen preparada una actividad-regalo que desconozco.  O sea, que, además, este post está incompleto, puesto que falta mi, ya típico, reportaje de "memories". Pero no pasa nada, haré la segunda parte en cuanto concluya el día... o mejor, después de haber dormido ocho horas del tirón... (me temo que no será hoy :P ).  Aún así, no me hace falta haber vivido el día para agradecéroslo por adelantado ("in advange", que se note que estoy aprendiendo algo de inglés).

Aunque aún no hay montajillo de vídeo, como la música no puede faltar en mis post, aquí va, ya la conocéis, esa cancioncilla que últimamente me da tan buen rollo... (Sé que me repito, pero ¿por qué no hacerlo si sienta bien?).

sábado, 27 de abril de 2013

¿Y SI QUIERO GRITAR...?

Y si estoy cansada, ¿por qué no duermo? Y si he dormido, ¿por qué tan cansada me siento?
Y si necesito tu abrazo, ¿por qué te aparto? ¿Por qué si no siento hambre, como, como un hambriento? ¿Por qué si quisiera volar, me cuesta tanto salir de mi encierro?

Ni siquiera lágrimas que limpien el polvo de mi desierto. Tan solo un llanto silencioso al que le gusta asomarse a mis ojos para enturbiar la poca luz que veo con ellos, desde esta oscuridad que no parece acabar.

Buscar y no encontrar. Desesperar, deseando no perder la esperanza y querer ser de otra forma, porque ser oscura no era lo que creía ser y ahora creo que  soy. No recordar cómo se miraba de color. Y cargar con más piedras pesadas por no lograr hallar el Sol. Todos parecen saber cómo, todos me dan la receta, pero mis ingredientes están rancios.

¿Y si quiero gritar y la voz se ahoga en una garganta reseca de tanto haber gritado antes? ¿Y si quiero correr pero de cristal se han vuelto mis piernas?





martes, 9 de abril de 2013

MOMENTOS PARA LLEVARTE EN LA MOCHILA. ABRIL 2013

Mi hermana me ha dicho que no quiere ponerse a llorar leyendo este post, así que  voy a evirtar sentimentalismos... La única manera de conseguir este propósito es no escribir demasiado, así que seré breve. 

Todos hemos disfrutado de esta visita de Irene, y sé que se va con penita, pero con las pilas cargadas. Así que, para esta ocasión he elegido canciones que me dan muy buen rollo para acompañar las imágenes de los momentos que he compartido con ella y con vosotros en estos días.Espero que disfrutéis de ellas y de los recientes recuerdos.

 Obviamente, en el reportaje faltan muchos días y mucha gente con la que mi hermana ha estado, porque, muy a mi pesar, yo no la he acompañado todo el rato para hacer el seguimiento gráfico...(no sería una hermana, sería una petarda). Sin embargo, sé que ha sido una semana intensa, que no esperaba pasarlo tan bien y aprovechar tanto las horas; así que aunque no aparezcáis en el montaje, de alguna manera estáis ahí. Seguro que ella lo escribirá así en su propio blog (ya sabes, nena, creo que ya te toca actualizar tu página, ¿estamos? Los que te echamos siempre de menos lo esperamos).

 Bueno, y aunque la "prota" es ella, he de decir que le roba el plano un personajillo dulce y tierno como el algodón de azúcar. Gracias a sus papis por querer compartir ese tesoro con nosotros. ¡Está para comérsela! 

sábado, 23 de febrero de 2013

EL CIRCO DE LA MARIPOSA

Esta tarde he compartido en facebook un enlace que colgó un amigo. Me ha emocionado y no me he resistido a subirlo también a este blog. A veces, un momento especial en la vida sucede simplemente estando en casa, sola y viendo un vídeo en youtube... así de simple.

Quiero conservar la emoción que me ha producido este corto. Y quiero compartirlo con vosotros porque estoy segura de que, como a mí, os hará reflexionar. A mí me ha hecho pensar que la mayor maravilla del mundo es creer en uno mismo, a pesar de todas las barreras que puedas encontrar, saber que está en nuestra mano vivirlas como muros infranqueables o convertirlas en retos que superar y de los cuales disfrutar...

Quiero tenerlo a mano para cuando se me olvide que en la vida lo importante no es tanto lo que ocurre, sino cómo quieras verlo y cómo quieras usarlo. Y, lo quiero tener a mano porque, precisamente yo, en muchas ocasiones, caigo en el error de ver las cosas desde el lado de la oscuridad.

Se lo dedico a mi madre, porque, probablemente ella, es, en mi vida, la que se empeña en no dejarme olvidar lo bueno de cada situación. Aunque parezca, a veces, que no escucho, sí lo hago...

Y, por si alguien siente curiosidad, como la he sentido yo, aquí tenéis algo sobre la biografía de Nick Vujicic.


Nick es el hijo primogénito del matrimonio de Dushka Vujicic y su esposo, el Pastor Boris Vujicic. Es originario de Brisbane, Australia, y nació el 4 de diciembre de 1982.

Su madre era una enfermera australiana que debido a su trabajo sabía todas las medidas que tenía que tener durante su embarazo y tuvo especial cuidado del mismo. No obstante, el bebé tuvo agenesia y nació con el síndrome de tretra-amelia, el cual se caracteriza por la carencia de las extremidades. Por lo mismo Nick nació sin brazos ni piernas; solamente tiene una pequeña formación o meromelia de lado inferior izquierdo. Al principio sus padres se sintieron devastados por su estado de discapacidad, pero agradecidos porque al menos Nick tenía salud.

Durante su edad escolar, Nick y su familia (incluyendo su hermano y hermana menores) se mudaron a Melbourne buscando mejores oportunidades. No obstante, el estado de Victoria les prohibió que él asistiera a una escuela regular debido a sus discapacidades físicas, (a pesar de que sus capacidades mentales siempre fueron totalmente normales). Más tarde, las leyes del estado australiano cambiaron, y Vujicic se convirtió en uno de los primeros estudiantes discapacitados en integrarse a escuelas regulares.

Al ser molestado por sus compañeros en la escuela, debido a su discapacidad, Vujicic tuvo episodios de depresión durante su infancia, y cuando tenía alrededor de ocho años, pensó en suicidarse. A los diez años trató de ahogarse en la bañera, pero no se dejó morir por recordar el amor que le tenían sus padres. Después de orar numerosas veces para que le crecieran brazos y piernas, se sintió agradecido por su vida, y eventualmente se dio cuenta de que él era único en la clase de retos que tenía que enfrentar, y que su vida podría inspirar a otras personas.


Nick se graduó con 21 años, especializándose en Contabilidad y Planificación Financiera. Comenzó sus viajes como orador motivacional, enfocándose en los temas que la juventud de hoy en día debe enfrentar. También da charlas para el sector corporativo, aunque su enfoque es ser un orador motivacional internacional tanto para comunidades no religiosas. Viaja con regularidad a distintos países para hablar en congregaciones, escuelas y grandes congresos. Ha hablado ya en los 5 continentes, en más de treinta países y con 12 mil personas cara a cara.
A la edad de 25 años, Nick quiso ser económicamente independiente. Deseó promocionar sus palabras mediante el show de Oprah Winfrey. Su primer libro, que completó a finales del 2009, se tituló “No Arms, No Legs, No Worries!” (¡Sin brazos, Sin Piernas, Sin Preocupaciones!)
Un DVD, “El gran propósito de la vida”, está disponible en su sitio web, Life Without limbs. La mayor parte de este DVD fue grabada en 2005, incluyendo un breve documental sobre su vida hogareña y cómo hace cosas normales sin extremidades. La segunda parte del DVD fue grabado en Brisbane, y fue una de sus primeras convenciones motivacionales.
Su DVD “No Arms, No Legs, No Worries!” está disponible en la red mediante su corporación de oración motivacional “Attitude is Altitude” (Actitud es Altitud).
La primera entrevista mundial en Televisión de Nick, promocionado en 20/20 (ABC) con Bob Cummings, fue transmitida el 28 de marzo del 2008
En el 2009 participó en un cortometraje titulado "The Butterfly Circus".
Fue la última persona entrevistada por el reconocido presentador chileno Felipe Camiroaga antes de su muerte en el 2 de septiembre de 2011, lo que llevó a que Nick levantara el animo de todo un país a través de sus palabras de aliento y contención.
En febrero de 2012 contrajo matrimonio con Kanae Miyahara. Con la cual espera su primer hijo que nacera en 2013. 


La organización Life Without Limbs, que Vujicic fundó en el 2005,está comprometida con dar motivación e inspiración a las personas sin extremidades. Esto lo hace mediante discursos alrededor del mundo.
Habla de temas como el miedo, el rechazo, la depresión, el sufrimiento e incluso las oraciones sin respuesta. Las charlas se dan en ambientes no cristianos como colegios y otros lugares públicos.
Apareció en un documental sobre su vida en “Body Shock”. El documental se llama “Nacido Sin Extremidades” y fue transmitido el 5 de mayo del 2008.
  • Biografía creada a partir de la traducción del artículo Nick Vujicic de la Wikipedia en inglés, concretamente de esta versión, bajo la Licencia Creative Commons Atribución-CompartirIgual 3.0 Unported y la Licencia de documentación libre de GNU.


lunes, 18 de febrero de 2013

HOY NO ME PUEDO LEVANTAR: QUEDADA DE FEBRERO DE 2013 DEL C.F.T

O, lo que es lo mismo, el Club de las Futuras Tontas se da un garbeo por la Costa del Sol.

Como, desgraciadamente, no ha sido posible reunirnos todas, es de rigor que quede constancia gráfica del evento, para que, así, las demás podáis ser partícipes de los buenos ratos del fin de semana.

No voy a censurar ninguna de las imágenes captadas por mi cámara indiscreta, a pesar de que alguna foto pueda herir la sensibilidad de los más "exquisitos"... Y, para evitar esta tentación (entre otros motivos), esta vez, no he editado ningún vídeo, sino que os presento las imágenes "a pelo". Está permitido reírse de las protagonistas, aunque, confío que, mejor, os riáis con nosotras.



Chicas, yo, después de este fin de semana concluyo que necesito más juergas... Estoy tan desacostumbrada que hoy cantaría aquella de Mecano "Hoy no me puedo levantar". De hecho, he conseguido levantarme de la cama después de más de 12 horas de reparador sueño (o, más bien, coma etílico) y, a pesar de todo ese descanso, he sido incapaz de ir a mi clase de inglés esta tarde. En vez de eso, estoy metidita en la camita, calentita y escribiendo este post.

Gracias por la visita. No me cansaré de decirlo: A pesar de no teneros cerca todo el tiempo, estáis todos los días, me hacéis bien y os quiero. Solo tengo una queja: ¿POR QUÉ OS DEJÁSTÉIS AQUÍ LOS FERRERO ROCHE Y LOS DORITOS?

domingo, 27 de enero de 2013

INVIERNO ALEMÁN

El pasado 15 de Enero, encomendándome a Dios y todos los santos (que ya se sabe lo que puede pasar volando con Ryanair), despegué rumbo a Alemania, por segunda vez en mi vida.

Si por el placer de viajar fuera, os aseguro que hay un gran número de destinos que han estado en mi mente, a lo largo de mi existencia soñadora, antes que Alemania; pero, antes, no tenía una hermana emigrante...

Ahora sí que la tengo, así que, no hay otra, si pillo un vuelo barato, me piro a Alemania, sea o no un idílico destino. Algo bueno tenía que tener estar desempleada..., al menos, tengo todo el tiempo del mundo para ir de viaje en cualquier momento. En fin, pelas no, pero, bueno, tampoco necesitaba mucho para disfrutar del viaje. Lo único importante era pasar unos días con ella. Desde luego, tengo que agradecer que allí me lo han puesto todo por delante. Y eso es lo primero que quiero decir en este post: Gracias "Chrisbir".

He tenido mala suerte, porque me llevé a cuestas los coletazos de un catarro del carajo y he estado fastidiada la mitad de mi estancia, pero eso me ha dado la oportunidad de saber que, si uno se pone malo en Alemania y necesita comprar algo en la farmacia, es necesario, como me indicó una amiga de mi hermana, que llevara a mano pastillas para el corazón... y es que, cuando te pasan la factura de los fármacos que necesitas comprar, corres el riesgo de sufrir un paro cardiáco. Así que, ya sabéis, si tenéis que viajar, echad en la maleta un pequeño surtido de lo básico, en cuanto a medicinas se refiere. No me extraña que mi cuñadillo sea un aficionado a los remedios caseros... No os imagináis que centro de mesa me montó con productos que contenían lo que necesitaba para combatir mi afección. En fin, no sé cuánto de todo lo que me ofreció tendría que haber comido y bebido para obtener la cantidad suficiente del prinncipio activo que requería, pero, desde luego, el detalle me hizo sonreír y olvidarme del dolor un ratito.  Así que, otra vez, gracias Christian.

Bueno, y del frío mejor ni hablo... Llevo casi una semana aquí en Málaga y, mientras la gente se queja de un frío de 12 grados, yo casi voy en mangas cortas, porque aún llevo en el cuerpo lo que es el verdadero frío. Es curioso, sé que hemos estado allí a bajo cero, pero, en realidad no sé a cuánto exactamente... y es que no hay termómetros en la calle... Como dice mi hermana, será para que la gente no se deprima... Y es que, la nieve es muy bonita, mucho, pero de lejos, y un ratito... que, después de un rato, cansa; está fría y moja. Que se ve muy chulo en las pelis eso de rebozarse en la nieve, pero, la realidad es que, yo, paso. Si me tengo que rebozar en algo, os juro que prefiero esperar al verano y rebozarme bien en las arenas de nuestras playas, que, después, vas y te metes en el agua, y listo. ¡Una gozada!

En fin, no me hagáis mucho caso, cada cosa tiene su puntito... es solo que le tengo un poco de rabia al sitio por estar tan lejos. No lo puedo evitar, ¡es que te echo mucho de menos, nena!

Pero hay una cosa que también quiero resaltar de este viaje. He tenido la oportunidad de reencontrarme con una pareja de españoles, que ya conocí la primera vez, y de conocer a una nueva familia que acaba de llegar. Son unas personas estupendas y me alegro mucho de que mi hermana pueda compartir momentos con ellos. Espero que sean muchos más. Y, por supuesto, espero volver a veros en mi próxima visita.

Y, del mismo modo, tampoco me puedo olvidar de una paragüaya, adoptada por España y emigrada a Alemania..., un peculiar personaje con la que he pasado un buen rato también y que sé que es  un apoyo para mi hermanita en Neheim. Ha sido un gusto conocerte y confío en que nos volveremos a ver. ¡Cuídame a la niña!

Un abrazo a todos y ánimo. Este pequeño vídeo es para todos vosotros, en especial, como no, para mi hermana. Y, por supuesto, para toda mi gente, para compartir con vosotros, como siempre, otro pedacito de mi vida.



(Es probable que en Alemania no podáis verlo, porque bloquean los vídeos, a saber por qué razón, pero le he mandado el original a mi hermana, así que ella os lo podrá enseñar.)